El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en colaboración con ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP), llevó a cabo en Noviembre 2023 numerosos vuelos de deportación, deportando a adultos y familias a diversos países como Venezuela, América Central, Brasil, Colombia, India y Perú. Esto se ha hecho en medio de la expansión del programa de "Gestión Acelerada de Deportación de Familias" (FERM, por sus siglas en inglés), implementado por el DHS desde el 11 de mayo de 2023. El programa FERM se enfoca específicamente en familias que ingresan a los Estados Unidos sin inspección, con el objetivo de un proceso rápido y simplificado de deportación.
Bajo FERM, las familias que ingresan sin inspección en la frontera sur deben indicar un destino final en una ciudad que implementa FERM y ser de un país con vuelos regulares de deportación. El programa implica colocar monitores electrónicos en los líderes de los hogares para una supervisión continua y establecer un toque de queda de 11:00 p.m. a 5:00 a.m. El cronograma acelerado incluye la referencia a oficinas locales, entrevistas de miedo creíble (CFI) en las oficinas de USCIS y procedimientos de deportación subsiguientes. El objetivo es completar todo el proceso, incluida una determinación negativa de miedo creíble, en 30 días.
Se utilizan monitores electrónicos para la supervisión electrónica y, si la entrevista de miedo creíble resulta en un resultado negativo, se toma acción inmediata para llevar a cabo la deportación de la familia.
El programa de Gestión Acelerada de Deportación Familiar (FERM) y las acciones de deportación relacionadas produce inquietudes sobre el proceso rápido de deportación, alegados abusos durante los vuelos de deportación y la falta de transparencia y rendición de cuentas. El Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Washington ha documentado problemas en los vuelos de deportación, atribuyendo la situación a la falta de claridad de las empresas involucradas y a supuestos maltratos a los deportados (https://jsis.washington.edu/.../06/14/abuses-in-the-air/).
El programa FERM conlleva una denegación de los derechos humanos al acelerar el proceso de deportación sin brindar el tiempo necesario para presentar casos y, según informes, al estar asociado con presuntos abusos que violan la dignidad y el respeto fundamentales. El monitoreo electrónico y el impacto en las familias, resalta la necesidad de transparencia y supervisión. La falta de respuesta a denuncias de abusos ha aumentado las críticas al programa(https://theintercept.com/.../amazon-ice-deportation.../). Estas críticas subrayan la importancia de asegurar que las deportaciones se realicen de manera que respeten los derechos humanos y cumplan con estándares legales y éticos.